Hacia una sociedad más sustentable
Desde hace varias décadas, se ha despertado la conciencia medioambiental de la mano de unos pocos precursores; quienes comenzaron a proclamar las consecuencias que sufriría el planeta de continuar con el modelo de producción y consumo irresponsable que prevaleció durante todo el siglo XX.
Hoy, entrados el siglo XXI nos encontramos en un momento de mayor conciencia y participación de la sociedad en lo que respecta al cuidado del medioambiente. Pero también, estamos en un momento de transición entre aquella sociedad y una mucho más madura en lo que concierne a los negocios, los sistemas de producción y los hábitos de consumo. Sin dudas todavía queda un largo camino por recorrer para llegar a ese escenario de óptima implementación por parte de la humanidad en su conjunto de tecnologías sustentables, pero los adelantos conseguidos ya son notables.
Los pasados 9, 10 y 11 de Octubre se desarrolló la Feria Gobierno y Servicios Públicos 2012, un evento al cual Droquimar asistió en calidad de visitante. Y donde se pudo comprobar las políticas implementadas en el país y los nuevos proyectos que buscarán conducir a la sociedad hacia ese equilibrio que implica el desarrollo sustentable. Y es que para conseguirlo no sólo necesita la regulación de los Gobiernos, sino también la participación activa de todos los ciudadanos en los diferentes roles que asumen, ya sea como productores o consumidores.
Uno de los desafíos, quizás el más complejo dado el nivel de participación activa que exige, es el de la basura. El tratamiento de residuos, lógicamente debería empezar en casa, y sobre todo a la hora de la compra de productos. Cada ciudadano en su rol de consumidor debe dar cuenta de aquellos productos con envases reciclables, reutilizables o biodegradables; con el objetivo de reducir la generación de basura. Luego también deberían realizar la separación de residuos en origen para evitar la mezcla de desechos biodegradables con aquellos de alta capacidad contaminante, que por supuesto necesitan pasar por un tratamiento especial para su posterior reciclado o reutilización.
Para ser más exactos, según detalla CEAMSE en su informe sobre cómo se compone la basura en Capital y Gran Buenos Aires, publicado en la revista Noticias CEAMSE N° 25, se puede observar que los desechos alimenticios componen el 41,55% del total. Por otra parte, el 16,64% corresponde a papeles y cartón, el18,5% a plásticos, 3,09% vidrio, 6,03% poda y jardín, 4,44% apósitos descartables y pañales, 1,41% metales, 5,80% material textil, madera, gomas, cuero, entre otros; la lista sigue, pero son estos los que representan el mayor flujo.
De esta manera, tomando consciencia de los residuos que se generan se puede realizar un gran aporte. Muchos de los procesos de tratamientos de residuos se encaminan a la transformación de nuevas fuentes de energía que redundará en una mayor eficiencia y aprovechamiento de los recursos y de mejor calidad de vida. Por nuestra parte, como actores sociales, será trascendental el compromiso, y el aporte para que la construcción de una sociedad sustentable sea realidad.
Hoy, entrados el siglo XXI nos encontramos en un momento de mayor conciencia y participación de la sociedad en lo que respecta al cuidado del medioambiente. Pero también, estamos en un momento de transición entre aquella sociedad y una mucho más madura en lo que concierne a los negocios, los sistemas de producción y los hábitos de consumo. Sin dudas todavía queda un largo camino por recorrer para llegar a ese escenario de óptima implementación por parte de la humanidad en su conjunto de tecnologías sustentables, pero los adelantos conseguidos ya son notables.
Los pasados 9, 10 y 11 de Octubre se desarrolló la Feria Gobierno y Servicios Públicos 2012, un evento al cual Droquimar asistió en calidad de visitante. Y donde se pudo comprobar las políticas implementadas en el país y los nuevos proyectos que buscarán conducir a la sociedad hacia ese equilibrio que implica el desarrollo sustentable. Y es que para conseguirlo no sólo necesita la regulación de los Gobiernos, sino también la participación activa de todos los ciudadanos en los diferentes roles que asumen, ya sea como productores o consumidores.
Uno de los desafíos, quizás el más complejo dado el nivel de participación activa que exige, es el de la basura. El tratamiento de residuos, lógicamente debería empezar en casa, y sobre todo a la hora de la compra de productos. Cada ciudadano en su rol de consumidor debe dar cuenta de aquellos productos con envases reciclables, reutilizables o biodegradables; con el objetivo de reducir la generación de basura. Luego también deberían realizar la separación de residuos en origen para evitar la mezcla de desechos biodegradables con aquellos de alta capacidad contaminante, que por supuesto necesitan pasar por un tratamiento especial para su posterior reciclado o reutilización.
Para ser más exactos, según detalla CEAMSE en su informe sobre cómo se compone la basura en Capital y Gran Buenos Aires, publicado en la revista Noticias CEAMSE N° 25, se puede observar que los desechos alimenticios componen el 41,55% del total. Por otra parte, el 16,64% corresponde a papeles y cartón, el18,5% a plásticos, 3,09% vidrio, 6,03% poda y jardín, 4,44% apósitos descartables y pañales, 1,41% metales, 5,80% material textil, madera, gomas, cuero, entre otros; la lista sigue, pero son estos los que representan el mayor flujo.
De esta manera, tomando consciencia de los residuos que se generan se puede realizar un gran aporte. Muchos de los procesos de tratamientos de residuos se encaminan a la transformación de nuevas fuentes de energía que redundará en una mayor eficiencia y aprovechamiento de los recursos y de mejor calidad de vida. Por nuestra parte, como actores sociales, será trascendental el compromiso, y el aporte para que la construcción de una sociedad sustentable sea realidad.
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